La externalización sigue ganando impulso en un entorno empresarial tenso, que obliga a las empresas a reducir costes. ICT Research prevé que el mercado mundial de la externalización (tanto onshore como offshore) crezca un 9,2% hasta los 464.000 millones de dólares en 2011, y que el mercado offshore alcance los 144.800 millones de dólares. La externalización a Polonia también va en aumento

La competencia entre países se intensifica para hacerse con un trozo mayor de este enorme pastel. India sigue encabezando la lista con una cuota de mercado del 42,5%. Le siguen de cerca China (31,5%) y Filipinas (7,4%). India y Filipinas, en particular, han reforzado sus infraestructuras y su legislación para situarse en una posición competitiva más favorable.

Los consultores y analistas empresariales califican de diferentes maneras el atractivo de un país como destino de externalización. Algunos sólo tienen en cuenta una combinación de factores como los costes, los recursos, las cualificaciones y el entorno empresarial y económico. Otros profundizan más e incluyen factores como el tiempo de viaje, las facilidades de transporte, la afinidad política y social, incluida la calidad de vida.

Dependiendo de los criterios, Polonia se encuentra entre los países más prometedores, ya sea entre los 10 primeros o entre los 20 primeros. La encuesta de Global Services/Tholons muestra que entre “ubicación” y “proveedor de servicios”, el 66% de las empresas participantes en la encuesta consideran que la primera es más importante a la hora de tomar una decisión de externalización.

Los países que compiten con otros por destinos de externalización están en la misma posición que cualquier empresa o negocio medio. Para ampliar su cuota de mercado, debe contar con una clara ventaja competitiva. Una ventaja que posee Polonia es su mano de obra multilingüe y multicultural.

Como el inglés sigue siendo la lingua franca en los negocios y la tecnología, India y Filipinas se han hecho con una importante cuota de mercado gracias a su oferta de trabajadores anglófonos. El panorama de la externalización cambiará en el futuro, ya que los servicios de externalización de inglés a inglés disminuirán a medida que se globalicen los negocios. La demanda de servicios de externalización multilingües de inglés a inglés aumentará a medida que se amplíe el mercado de habla no inglesa.

Los avances tecnológicos que permiten a los clientes comunicarse directamente con las empresas a través de tabletas, teléfonos inteligentes y otros dispositivos en línea sin necesidad de comunicación de voz será otro factor importante que cambiará la cara de la externalización. En este nuevo entorno, Polonia cuenta con capacidades especiales para satisfacer las necesidades de externalización del futuro.

El inglés y el alemán han sustituido al ruso como segundas lenguas de facto en Polonia. Esto ha sido posible gracias a los activos programas de enseñanza de lenguas extranjeras en más de 500 centros educativos de Polonia, uno de los mayores de Europa. Para reforzar la ventaja lingüística, los salarios relativamente altos de Polonia han atraído a inmigrantes de países en desarrollo como Vietnam, Grecia y Armenia, que se suman a la población de alemanes, checos, rusos y de otros países europeos. Ya hay empresas en Polonia que ofrecen servicios de voz en seis lenguas europeas para clientes anglófonos.

La capacidad de tender puentes entre las lenguas inglesas y las que no lo son se convierte en un activo aún más valioso a la hora de atraer negocios de externalización para trabajos cualificados de alto valor, en los que es crucial comprender con precisión los requisitos del cliente y las capacidades del proveedor. Esto brinda al sector polaco de la externalización la oportunidad de ampliar sus puntos fuertes más allá de los centros de llamadas y las tareas de gestión de las relaciones con los clientes, a los sectores jurídico, médico, editorial, artístico y del software.

Al aprovechar su ventaja competitiva multilingüe, Polonia puede posicionarse de forma única como el destino elegido por la industria de la externalización en un futuro más globalizado.